La Hospedería de Roda de Isábena está situada en la comarca oscense de La Ribagorza, entre Barbasto y Graus. Forma parte de la Red de Hospederías de Aragón y fue inaugurada en 1995. El entorno de este establecimiento, donde reina la tranquilidad, es puramente medieval. Está construida sobre la antigua abadía, en la plaza mayor del pueblo.
Cuenta la historia que en la antigüedad se trataba de una fortaleza defensiva romana. Posteriormente, fue residencia de los Condes de Ribagorza y Sede Episcopal entre los siglos X y XII. Además, se encuentra enfrente de la catedral de San Vicente Mártir, un templo con mucha historia. En un principio, fue consagrada por el Obispo Sisebuto en el año 819. En diciembre del 956 se consiguió una diócesis propia, gracias a la intervención del arzobispo de Narbona. Años después fue destruida, así que los ribagorzanos decidieron volver a construirla en 1017. Llaman la atención las tres criptas bajo el suelo de la cabecera, que hacen que el presbiterio y el altar mayor se eleven sobre la nave central. Fue declarada “Monumento histórico-artístico” en 1904.
La Hospedería, dotada con dos estrellas, alberga diez habitaciones perfectamente adecuadas a las necesidades actuales, aunque mantiene detalles de la abadía original. Una de las salas más importantes es donde se ubica el restaurante, un salón abovedado de piedra que fuera antiguo refectorio de la catedral. También llama la atención la conocida “Torre Gorda”, restos del torreón vigía del siglo XI, que en la actualidad se utiliza como salón de reuniones. Pero, sin duda, el rincón más especial es la preciosa terraza, desde la que se admira un espléndido paisaje que transmite pura calma y tranquilidad. Además, una de sus grandes ventajas es que se encuentra situada en la ruta de los Pirineos, perfecta para programar desde aquí paseos históricos y naturales
